Relacionados con , , ,

Pizzero en skate: la pizza nunca llega fría

Por Noticias Singulares: On: 9:34:00
  • Comparte ►
  • Aparcó la moto para llevar los pedidos en tabla. Cuenta que lo hace más rápido. 


    Andrés Diez empaca el manjar y en vez de subirce en la motora  de la pizzeria o en una bicicleta para entregar el encargo, agarra su patineta y se escurre por las vias de Chapinero. Este pizzero y skater profesional es el único en Bogotá que reparte pizza en un skateboard. “Empezamos con el negocio en la calle 73, al frente de la Pedagógica. Luego nos vinimos para Chapinero y montamos este local”, dijo Andrés, en local de HC 10 Pizza, en la carrera 9a, con calle 62, su negocio desde hace 5 años.

    Hicieron a un lado la bicicleta panadera de los envíos y la moto estruendosa e invasora de las aceras y se aventuraron sobre sus tablas, que se ajusta a cualquier portal y entra en el ascensor. “Llegamos hasta la calle 72, Chapinero alto, bajo, los linderos con Teusaquillo”, señala  Andrés, quien practica el deporte desde hace 18 años y es un referente, al igual que su establecimiento, para los seguidores y los que practican la actividad en la ciudad. ¿Y habrá caído al suelo?

    Andrés reflexiona la respuesta unos segundos y dice que no, que ya le tiene el tiro a la ‘vuelta’ y hasta puede llevar en un sólo viaje tres cajas, “Lo único que me ha pasado raro es que la tabla se me queda en las porterías o que a veces en los ascensores chiquitos o entra el aparato o el pedido”. Su capacidad al tiempo de andar las calles de Chapinero le permiten romper récord personales: hasta la 72 con 11 en 10 minutos. A la Circunvalar con 63, ocho minutos. Los que esperan ansiosos por la pizza cuando lo ven llegar así, casi volando, se asombran y le preguntan que ¿cómo lo hace? ¡qué mucho teso usted!

    Andrés está casado con Marcela Carvajal y procrean dos hijos: Simón y Martín, ambos de ocho años. Los dos estudiaron gastronomía y desde hace tiempo en la Pedagógica preparan pizza ‘guerrera’ y ‘callejera’ de 5.000 pesos la ración con bebida incluida. En un viernes bueno, de ‘casa llena’, como los llama él, pueden despachar hasta 500 porciones.

    El sitio, que está decorado con patinetas en la paredes y grafitis, además es punto de reunión para los skaters bogotanos. Llama otro cliente, tiene hambre, Andrés a la tabla.